En una FIV clásica se ponen en una misma placa de cultivo un óvulo y unos 100.000 espermatozoides aproximadamente a la espera de que alguno de ellos logre fecundar al óvulo.
Por el contrario, en el ICSI, únicamente es necesario un espermatozoides, que serán introducido directamente en el interior del óvulo.
Puedes leer el artículo completo en: ¿Qué es la ICSI o inyección intracitoplasmática de espermatozoides? ( 81).
Por Andrea Rodrigo (embrióloga) y Marta Barranquero Gómez (embrióloga).
Última actualización: 28/11/2016